Por: Juan Carlos Vidal Etcheverry
Consejero Regional de los Ríos
Presidente Comisión de Régimen Interno
La reciente aprobación por la Cámara de Diputados de la elección directa de los Consejeros Regionales, constituye un paso para la efectiva descentralización del país, debido a que la ciudadanía, al elegir a sus representantes en forma directa, podrá comprender de mejor manera cuál es el rol de los Consejos Regionales y de este modo, la importancia que significa tener una relación mas estrecha con esta institución.
En un país con un fuerte centralismo administrativo y económico, potenciar las regiones, en especial aquellas que se encuentran mas alejadas de la zona central, es un imperativo urgente, para poder revertir esta tendencia cada vez mayor de concentrar la inversión pública y privada, entre la Quinta y Octava región, que en conjunto con la región de Antofagasta, poseen casi el 90% del Producto interno bruto del país. Entonces, desde las regiones debemos hacer fuerza común y presionar para tener una mayor asignación de recursos públicos, y poder así hacer más atractiva la inversión privada. La elección directa de los consejeros por la ciudadanía, tiene entonces el efecto de lograr una relación más estrecha con la gente, pero para que tenga efectos más concretos, debe ir asociada a una mayor asignación de recursos para las regiones que los actuales y mayor competencia para hacer real la descentralización administrativa, y que la gente pueda percibirlo.
Recordemos que para el presente año 2013, el Ministerio de Obras Públicas tiene asignado el 50% de su presupuesto, en solo dos megaobras a desarrollarse en la capital, a lo que se suma el resto de la innumerable cantidad de obras que concentra la Región Metropolitana, lo que demuestra que la mayor parte de los recursos fiscales de este ministerio, se gasta en Santiago y a regiones como la nuestra, por mucho que se haya incrementado la asignación de recursos y proyectos con la creación de nuestra región, sigue siendo residual y mínima, en el contexto de la inversión pública nacional.
En consecuencia, cada paso que signifique descentralizar y potenciar el trabajo regional, debe alegrarnos, pero para que tenga efectividad, debe ir asociado a mayores recursos e inversión y mayores competencias y poder de decisión regional.
