Por Juan Carlos Vidal EtcheverryConsejero Regional Los Ríos
A partir de la creación de la región de Los Ríos se dió un impulso a obras de infraestructura, emprendimiento, actividades culturales y deportivas, etc., y también a las obras de conservación y mantención de nuestro patrimonio histórico, cuyo paulatino deterioro hace peligrar su conservación.
El Consejo Regional en estos años, ha aprobado millonarios presupuestos para estas obras y para otorgarle la relevancia que se merece. Hay un buen trabajo de los profesionales encargados de estos asuntos y al materializarse los proyectos, nuestro patrimonio -en especial las fortificaciones hispanas- recobrarán su esplendor y debiera contribuir significativamente a nuestro desarrollo turístico regional. No obstante, y a pesar del empeño del Consejo Regional, el avance de los proyectos ha sido lento y pareciera que la autoridad ejecutiva, en quién recae la determinación de priorizar la ejecución de las obras, no le otorga la relevancia que requiere, en especial las de conservación.
En este mismo contexto, me llamó la atención que en la cuenta anual del Intendente hubo una muy mínima y casi desapercibida referencia a la infraestructura patrimonial y si uno la compara con las cuentas de los años anteriores, la referencia es a los mismos proyectos e incluso en las mismas etapas, lo que ratifica que existe un lento avance en estas materias y denota una falta de priorización. El transcurso del tiempo acelera el deterioro y el mejor ejemplo lo entrega el Fuerte Niebla, que sufre un peligroso socavamiento en su base.
La riqueza de nuestro patrimonio histórico, requiere de una mayor preocupación y determinación en materializar los proyectos, para lo cual, el Gobierno Regional debe agilizar la ejecución de éstos y cumplir con los acuerdos y los propósitos de los consejeros regionales, quienes en estos 5 años de vida de la región le hemos otorgado a nuestro patrimonio histórico toda la importancia que merece.
