Soy Abigail Catalan Matus, una joven de 22 años que quiere hacer la siguiente denuncia en su diario.
Ayer, mi padre Rolando Catalan, se dirigio al cementerio municipal de la ciudad para visitar la tumba de su esposa y madre mía, Luisa Matus Hidalgo, fallecida hace 1 año 10 meses, y se encontró con un terrible escenario. En la tumba de mi madre habia una foto de ceramica impresa y ayer estaba toda rallada con algo color rojo y raspada con algo con punta por lo cual quedo inservible. Aparte de ello extrajeron un remolino con forma de flor, situación que para la familia no tiene nombre y causa un gran dolor, removiendo aún mas la pena de su partida.
Espero que esta carta sirva para crear conciencia en las personas de que debemos respetar y proteger nuestro entorno, y más si se trata de nuestros seres queridos que han partido, porque le debemos respeto por lo que significaron para cada uno, especialmente una madre, algo que no se puede reemplazar. Frente al destrozo, le preguntaría a las personas que lo hicieron, ¿Acaso les gustaría que esto se lo hicieran en la tumba de su madre?
Atentamente,
Abigail Catalan Matus
