Ojala existiera este “Celo Cultural” en la calidad de los stand que se arman para la feria conmemorativa de La Semana Unionína. Lugar en donde tristemente las estructuras utilizadas, dan pena por lo precario y ordinario de sus instalaciones, donde reciclaron las urnas secretas de Cholguan utilizadas en las votaciones y sobre éstas una lata de Zinc.
Tema aparte es que la mayoría de los locatarios presentan productos que distan mucho de haber sido elaborados en forma artesanal y más parecen locales propios de un persa de baja categoría, donde hasta ropa interior era posible observar en años anteriores.
Tema aparte es el despilfarro de recursos en un “Show”, ya que los más de $50.000.000 que se gastarán en el actual evento, pudieran utilizarse adecuadamente en la implementación de talleres de artes, para que así la población Unionína tuviese la posibilidad de participar de cursos y talleres en forma permanente durante el año; el lugar incluso podría ser la antigua estación de ferrocarriles, la cual fue remodelada hace algunos años y actualmente esta vacía.
Da pena ver como es de descuidado el tema “Turismo” (incluso despreciado) en nuestra comuna, eso, a pesar de todo el potencial que tiene, pues no resulta entendible que a pesar de tener muchos elementos valiosos para los turistas, no se haga nada por promoverlo.
A modo de ejemplo, puedo señalar el kiosco de Turismo ubicado en la Ruta 5 cercano al Cruce de los Tambores, el cual permanece cerrado todo el año, cuando ésta debiese ser la primera carta de presentación ante los turistas que visitan la provincia, para lo cual debiese funcionar en forma permanente con personal capacitado, más la colaboración de alumnos en práctica de carreras relacionadas con el tema turismo. La pileta de la Plaza de la Concordia, recién hace un par de semanas dispone de agua; implementar señalética para orientar los turistas y finalmente, disponer de información turística a nivel de la plaza, pues ningún turista debe de adivinar que la oficina municipal de “Información Turística”, funciona en el tercer piso y por cierto en horario de oficina.
Tema aparte es el hecho de que como ciudad, nos farreamos uno de los edificios más emblemáticos, como era el antiguo Club Alemán y Hotel Unión, el cual a pesar del enorme valor patrimonial, cultural y turístico, fue demolido.
Andres Alegria Nicolaides
