20 diciembre 2015. Los ríos Calcurrupe, Quimán, Nilahue, Caunahue y Pitreño, entre otros afluentes, fueron sondeados por expertos de la Universidad Santo Tomás
La publicación de la Norma Secundaria de Calidad Ambiental de la cuenca del río Valdivia, marcó un hito en los esfuerzos para proteger las aguas de la región. Con el mismo afán, la seremi del medio ambiente de Los Ríos solicitó realizar una consultoría para comenzar a reunir los antecedentes científicos, que permitan en un futuro comenzar generar un instrumento de gestión ambiental que resguarde la cuenca del Ranco.
El trabajo se lo adjudicó el Departamento de Ciencias Básicas de la Universidad Santo Tomás de Osorno, con un equipo de trabajo que ha estado evaluando la presencia de biodiversidad acuática.
Alexis Santibañez, Director del mencionado Departamento, comentó que lo que buscan es ser un aporte en la creación de la línea base ambiental de los afluentes del Lago Ranco y el Lago Maihue: “Esto quiere decir que de alguna forma queremos aportar con el conocimiento sobre aves, mamíferos, diversidad de peces, insectos, crustáceos y anfibios presentes en estos cuerpos de agua. Además de la generación de una base de datos sobre estudios previos hechos en la zona”. Afirmó.
La seremi de la cartera verde, Carla Peña, valora este primer paso y sus intenciones futuras, además hace hincapié en lo largo que son los procesos para contar con instrumentos de gestión ambiental.
“Esta consultoría es pequeña, son obras de menor impacto, pero es hora de comenzar a trabajar para lograr la protección de estos importantes afluentes, recordemos que el proceso de la norma secundaria del Valdivia duró cerca de diez años, por lo tanto, mientras más pronto comencemos a realizar acciones en la Provincia del Ranco, mejor”. Finalizó.
Es importante destacar que el equipo de trabajo ha tomado todos los resguardos necesarios, para dar cumplimiento a los protocolos de bioseguridad, solicitados por la seremi del medio ambiente y exigidos por los servicios competentes al área.
