Por Hugo Ortiz De Filippi. Abogado, Presidente del CORE Los Ríos. Vicepresidente nacional del Partido Regionalista Independiente.
Creo que es importante destacar las distintas opiniones vertidas por algunos ex Ministros de Hacienda, publicadas en algunos importantes medios escritos, principalmente los días domingos, donde con acopio de antecedentes, formulan duras críticas a la gestión del gobierno en materia económica y en la responsabilidad que le cabe en el deteriorado clima de confianza y bajas expectativas que atraviesa el país.
Una de esas críticas, la formuló el ex Ministro Felipe Larraín, quien señaló que una de las situaciones más preocupantes es la brusca caída del PIB de tendencia, y lo que es más grave, señalaba que no se ven signos de mejoría, y que las prioridades del gobierno no parecieran estar en la búsqueda de revertir esta condición por medio de la innovación, productividad y mejoras en el mercado laboral.
Agrega este comentario, que no se saca nada con eliminar las incertidumbres cuando “las políticas públicas que quedan son malas y dañinas para el crecimiento”. Finalmente señala que además de las amenazas de la economía internacional, lo más preocupante es como se enfrenta este escenario si se “insiste en el empecinamiento e ideologización de reformas deficientes”.
Pero muchos podrían decir que esta es una crítica poco objetiva, ya que Felipe Larraín fue Ministro de Hacienda de Sebastián Piñera.- Sin embargo, el ex Ministro Aninat, que era y es de la Concertación, hoy nueva mayoría, apunta en el mismo sentido, al señalar que el gobierno debe mirar a donde se conduce al país en el mediano y largo plazo con certezas, a riesgo de perder adherentes, pero no se pueden eludir los costos ni la toma de decisiones. Agrega Aninat en sus comentarios que el país no enfrenta ni una recesión ni una crisis y que, si no que una semi parálisis y que, de haber más claridad política, consenso y liderazgo, el país ya estaría creciendo. Indica que “cuando hay ambigüedad, las cosas no mejoran, y lo que yo veo, dice este ex ministro, es que del cónclave a esta fecha no hay más certidumbres”.
Pero tenemos otros ejemplos: También el ex Ministro Marfán es claro al señalar que el rol de un ministro de Hacienda, y del actual particularmente, es evitar que “la lógica política le pase la aplanadora a la lógica económica” ya que “Existe un claro riesgo de una desaceleración estructural de la economía chilena”.
Esta frase de este ex ministro, es tremendamente decidora, dejándonos claro, que estamos frente a un pésimo desempeño en materias económicas y las consecuencias, las sufrimos todos.
