18 Diciembre 2014.
Por Erna Guerra, Seremi de Educación.
Fortalecer y revalorizar la labor docente a través de medidas concretas es uno de los compromisos centrales que se tranzan al interior de la Reforma Educacional que impulsamos como Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet.
Se avanza en forma simultánea mediante el diálogo e iniciativas que nos permitan establecer una carrera docente que defina mejores remuneraciones; introduzca incentivos y aumente gradualmente el número de horas de la jornada laboral docente que se destine al trabajo fuera del aula. Pero además, queremos instaurar un desarrollo profesional de calidad que reduzca de forma gradual el número de estudiantes por aula. En esta materia se avanza de manera sostenida.
Ejemplo de ello, es el cumplimiento de este Gobierno con la agenda que se desarrolla en conjunto con el Colegio de Profesores, donde destacan las mesas de trabajo para dar respuesta al agobio laboral como también a las pensiones para profesores traspasados a las municipalidades durante la dictadura.
Asimismo, recientemente se aprobó en el Senado en general y en particular el proyecto que otorgará titularidad a 33 mil profesores a contrata en Chile, y en Los Ríos a más de 800 profesionales de la educación pública. Es un acto de justicia que hoy se concreta y que da tranquilidad a miles de docentes que ya no estarán con la constante preocupación e incertidumbre sobre su estabilidad laboral.
Y en esa misma línea, el ejecutivo envío una iniciativa legal que llevaba más de dos años en tramitación y que dice relación con el descongelamiento y aumento en cerca de $100 mil la remuneración total mínima de los docentes, y de igual forma, se enviará un proyecto de incentivo al retiro para los profesores que al año 2015 cumplan con la edad de jubilar.
Necesitamos que la educación chilena sea de calidad, pero también inclusiva, donde ningún niño, niña ni joven quede fuera de las oportunidades educativas y es por eso que estamos trabajando profundamente como Gobierno, pero también como sociedad de generar esta transformación, la cual sin la participación y aporte de los docentes no podremos lograrlo. La labor de nuestras maestras y maestros debe ser prestigiada y posicionarla en el sitial que se merece como formadora de nuestra nación.
