30 Abril 2014.
Antonio Parraguez, es presidente provincial del Partido Socialista en la provincia del Ranco y miembro del partido en su comuna, Río Bueno. Transcurridos más de 40 días desde que asumiera su segundo mandato Michelle Bachelet, el dirigente provincial se refiere a la marcha del gobierno en la región, en particular al desempeño del intendente de la región de Los Ríos, Egon Montecinos, quien naciera políticamente vinculado al Partido Socialista en la comuna de Río Bueno, ciudad donde además se inicio en el mundo laboral, como asistente social del hospital local.
¿Cómo analizas los primeros 40 días del actual gobierno regional?
A veces uno quisiera partir con esta dicotomía o encontrarse con una opinión distinta. Alguien me pudiera decir cómo en poco más de 30 o 40 días puedes evaluar, analizar o disentir.
Creo que muchas veces el intendente, que es un compañero mío, ha tenido actitudes poco atinadas. Creo que ha perdido un poco su norte y su fuerza, su capacidad, su independencia. Me parece válido que él trabaje con todo los sectores: parlamentarios, alcaldes, concejales y la ciudadanía, pero por sobre todo no debe perder su independencia. Él fue llamado por la presidenta por su capacidad. Por lo tanto, al intendente le ha faltado, precisamente, un accionar político. No está en tela de juicio su capacidad, su formación profesional técnica, creo que merecimientos tiene de sobra. Lo que yo cuestiono es su maniobra política, donde muchas veces he querido ver que levante la voz el Egon Montecinos que yo conocí cuando era asistente social en el Hospital de Río Bueno, y no lo veo.
Esa es mi mirada, puedo estar equivocado, pero creo que hoy día el gobierno lo que quiere es una persona que este más inserta, y que las instituciones le den el tiempo y espacio. Hoy día el intendente Montecinos creo que no lo ha permitido. Puedo entender que su agenda este acotada, pero uno tiene que agarrar el teléfono, utilizar los medios que hoy tenemos… hoy día lo he visto lejos. Por lo tanto, esa es mi opinión, que se ha abanderizado con cosas indefendibles.
Con respecto a ese punto…¿cuál es su opinión sobre las declaraciones que realizó para defender a Jaime Jaramillo?
Primero que todo, por una formación cristiana yo no soy quién para juzgar a nadie, pero creo que los elementos que yo tengo al alcance de la mano….Tuvo que haber dicho: «momentito, esto no es presentable». Porque hoy día nuestra sociedad está tan empoderada de la información o la busca… Esto es una cuestión de retroceso: van a tirar piedras, como en los tiempo de Jesús que había que matar con piedra a los que cometían errores. Creo que defender algo indefendible me pareció poco atinado, poco inteligente, poco sensato lo que hizo el intendente.
Hoy día nos encontramos con que Jaime Jaramillo presentó su renuncia el pasado jueves, y no la presenta por otra cosa que los hechos que estaban a la luz, y le van a estar repiqueteando a cada momento, en cada segundo y en cada acción. Creo que eso no le hace bien al país, al gobierno de Michelle Bachelet y no le hace bien a la política.
Quiero destacar que esto es una mirada bien humilde, pero con mucha fuerza y viene desde mi fuero interno, muy personal. Aquí no quiero involucrar a nadie.
-¿Ve en el actual Intendente lo que ha señalado públicamente de descentralizar y más aún se ven esas señales en nuestra provincia?
La verdad de las cosas no he visto mucho accionar. También debo reconocer, en aras de la verdad, que no he seguido su línea cronológica de agenda acotada, pero no le he visto, ni tampoco escuchado. Me parece que los asesores que tiene a lo mejor no están con la nota musical justita. Yo creo que hay que tener pragmatismo y tener cosas acotadas y hay que hacerse asesorar. A veces cuesta entender que los miembros de la conducción política, algunas veces, podemos entregar elementos positivos y eso a veces no lo consideran. Hoy día hay una equivocación, los caminos están errados. Se escucha la voz del parlamentario, ya sea diputado o senador, concejal y no las bases. Cuando nosotros somos dirigentes políticos, nosotros somos los conductores del partido y ellos son mandatarios. Por lo tanto, ellos deben dar cuenta, dentro de lo posible, a lo que el partido requiere y no el partido rendirle pleitesía a estos actores que son de cierta relevancia.
Por último, el dirigente Parraguez hizo un peculiar análisis de los gobernadores: Los gobernadores hoy día no tienen sentido, en su época, que eran provincias, las 25 provincias, a lo mejor cumplían de verdad, más allá de una política administrativa y habría que pensar de verdad si un gobernador sirve o no.
