Por Henry Azurmendi. Intendente de la región de Los Ríos
La tarde de ayer, y mediante un oficio, le comuniqué a la Ministra de Obras Públicas, Loreto Silva, lo agradecidos que estábamos en la región de Los Ríos, por acceder al clamor ciudadano de concretar la anhelada doble vía Valdivia-San José, ruta que se construirá con dineros del MOP, a través de la Dirección de Vialidad y no por la empresa privada, con lo que se evita así el cobro de peaje a la comunidad.
Este importante avance, concretado gracias a la gestión que realizaron muchos en el nivel central, incluyendo al senador Carlos Larraín, no fue más que la respuesta, del Gobierno del Presidente Sebastián Piñera, a una preocupación ciudadana, a un pedido transversal y enérgico de actores políticos, sociales y vecinales. Y es que se trata de una vía muy importante para la conectividad entre Valdivia y las comunas, y el costo no lo podía pagar la gente. Pese al espíritu optimista que tuvo el envío de la misiva oficial a la líder de la cartera, la sensación interna fue mermada por la aún latente tragedia carretera vivida la tarde de este jueves.
Como ya vimos a través de este y otros medios de comunicación, un furgón con trabajadores contratistas de la comuna de San José de la Mariquina, impactó de frente a un bues inter regional, accidente que arrojó un saldo oficial de 14 heridos, y lo que es peor, seis personas fallecidas. Si bien la fatal colisión no guarda relación directa alguna con la doble vía, si nos hace reflexionar sobre la necesidad de apurar el inicio de las obras de mejoramiento en el tramo, por ello incluí en el oficio, la solicitud formal a la Ministra Silva; de adelantar la entrega de recursos para el segundo semestre de este año, y comenzar lo antes posible con las obras de mejoramiento del tramo Valdivia – Pichoy (24.000 millones de pesos), y lo más importante, adelantar los recursos para el diseño de la obra completa en el presupuesto 2014, por más de mil 500 millones de pesos.
Porque ninguna gestión en el servicio público es completamente exitosa sin la real voluntad de sus autoridades, sin la fuerza de la gente, y sobre todo sin considerar el bienestar de la comunidad con fin único. Por esa y otras razones más, y con la responsabilidad que me exige el cargo, hice ver y seguire insistiendo al nivel central la urgencia de mejorar la seguridad en la doble vía, nuestra doble vía sin peaje.
